N°86 Marzo 2014
Estoy muy preocupada por el tiempo que pasa.
La sensación es que el tiempo se ha ido, se va, y no lo aprovechamos como deberiamos. En el pasado, el tiempo venia marcado mas que nada siguiendo el ritmo de la naturaleza, el dia iniciava con la salida del sol y terminaba cuando el sol se ponia. Hemos sido capaces de mejorar progresivamente la calidad de nuestras vidas, con la tecnica, con la tecnología, con el arte, con el conocimiento, con todo lo que trivialmente llamamos civilización, y por esto agradezco el progreso.
Cada vez estoy más convencida de que la vida es efímera, es como que “estamos/somos” sin un plazo como el yogur, sin una fecha de vencimiento o mejor dicho con una fecha desconocida. Por lo tanto, seria sabio el poder ser/estar lo mejor posible, tener y afinar la capacidad de comprender y apreciar a los demás y la belleza en todas sus formas en la mejor forma posible.
Y para ello es necesario el conocimiento, es por esto que uno estudia, lee, aprende día a día; nos preparamos para poder desarrollar al máximo la comprensión de todo lo que está a nuestro alrededor. Aprendemos a distinguir entre las cosas útiles y las inútiles, entre lo que podemos dar y dejar a los demás, y lo que podemos compartir. Y es por esto que el tiempo es importantisimo, porque no vuelve, mientras vivimos enfrentando continuamente un desafio detras del otro, sin tiempo para pensar. Nuestro cerebro es estimulado sin pausa, y no todos los estímulos son benéficos, muchas veces detrás de estos estímulos existe solo el vacío o simplemente la banalidad.
Escuchamos la radio, la television, el celular, el tablet, la publicidad, los juegos, los avisos luminosos intermitentes, todas señales siempre presentes en la vida cotidiana y en cualquier lugar o mejor dicho en todos los lugares que frecuentamos.
Los invito a sacar el máximo provecho de nuestro tiempo!
